Es lección de primer semestre en cualquier aula de Arquitectura, aprender a balancear la función con la forma para lograr un espacio óptimo que genere bienestar al ser humano que lo ocupa para cualquiera de sus funciones cotidianas ya sean residenciales, laborales, educativas, entretenimiento, etc.
Sin embargo durante miles de años la Arquitectura ha sido de todas las artes, aquella que pareciera reservada solo para reyes, sacerdotes, políticos y millonarios, pero no para la gente "de a pié", y ser por lo mismo, la más incomprendida de todas.
Y como siempre, serán solo mis doce lectores asiduos quienes se estarán preguntando a que viene esta reflexión y la respuesta está cuando visitamos en Bosques de las Lomas en el D.F. el conjunto que realizó grupo Desc bajo el diseño del Arq. Teodoro González de León, y decimos que fuimos a las oficinas de "El Pantalón" (1) o si pasamos por el edificio en Santa Fe, también en el D.F. que hizo el Arq. Agustín Hernández y que nadie sabe que se llama corporativo Calkamul pues todo mundo le dice despectivamente "La Lavadora" (2).
Es curioso como dos grandes arquitectos a quienes les conozco obras que son verdaderas poesías espaciales como la casa del primero en la Condesa (03) y el despacho particular del segundo en Bosques de las Lomas (04), pudieron ser víctimas de su propio diseño y presas de dos apodos que denigran a la Arquitectura misma.
En el caso de Querétaro resulta que el primer gran conjunto de oficinas y residencial llamado "Central Park" (05) es identificado por sus tremendos volúmenes rojos en la parte superior de cada edificio y a la fecha se ha salvado de un apodo, pero yo sigo como el personaje alemán de Eugenio Derbez diciendo cada vez que paso por debajo de esos edificios... "Que alguien me explique" pues aun sigo sin entender para que sirvan...
En el primer caso de González de León a quien admiro y respeto profundamente se le fue el lápiz y como cualquier ser humano la tentación de abusar de la forma por encima de la función, habiendo "pegado" dos edificios en la parte superior para que pareciera que es un solo edificio con un "hoyo" en medio, le ha provocado pagar un precio alto con un apodo que nunca debió tener.
El orificio circular del conjunto Calkamul es definitivamente un capricho formal sin pies ni cabeza, error que del mismo modo denigra la obra de un Arquitecto con obras fuera de serie, y quien también pagará una penitencia por décadas con el susodicho apodo de "La lavadora"...
Y para el caso de Central Park y mientras "nadie me explique", creo que no tardará alguien con imaginación en darle un buen apodo como ya lo tiene "El platillo volador" (06) es decir el call center de Santander cerca de Jurica.
Cuando un Arquitecto recurre a recursos escenográficos para hacer valer su obra, significa sin duda alguna que carece de esencia y valor intrínseco, pues tenemos casos contrarios como la obra del recién fallecido Arq. Carlos Mijares quien supo balancear función, forma y sobre todo el material que daba vida al espacio mismo por dentro y por fuera como el ladrillo, en obras como la Iglesia anglicana en las Lomas de Chapultepec (07) o el caso de Le Corbusier (Charles Èdouard Jeanneret-Gris) en Francia quien en su máxima expresión de balance de material, función y forma logró la capilla de Notre Dame du Haut mejor conocida como la Capilla de Ronchamp (08), agregando además un elemento que pocos han logrado de manera tan excelsa, como el manejo de la luz que cumple una función fundamental en esta obra, logrando integrar en un todo la función, la forma y el material predominante como es el concreto.
Arquitectos que "están de moda" hoy día, y sobre todo muy cotizados como Norman Foster, quien ha sido contratado por el Gobierno de México para el nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, es otro caso de un diseñador que vende más escenografía que Arquitectura, pues a costa del presupuesto de un gobierno o el bolsillo de un particular abusa de las formas, tampoco ha estado exento de tener una obra con un apodo, pues tal es el caso de "El pepinillo" en la ciudad de Londres (09), el cual con su caprichosa geometría exterior rompe con la armonía de la ciudad. Invito a cualquiera a revisar el diseño del nuevo aeropuerto de la ciudad de México (13), y observar la ineficiencia que genera su capricho formal. Y como nadie se acuerda del lago de Texcoco a estas alturas, lo que sobra es terreno para hacer lo que sea...
"La fábrica de gas" (10) es como los parisinos conocen al centro cultural Georges Pompidou a unas cuadras de la catedral de Notre Dame, y con ello el Arq. Renzo Piano ya tiene en su haber un edificio con apodo... por algo será. Este edificio, además de espantoso, me deprime.
No estoy peleado con la forma siempre y cuando vaya de la mano con la función, pero el abuso de la misma es capaz de dañar por siempre la imagen de una ciudad. Caso contrario es la pirámide de cristal (11) en el centro del Museo de Louvre que de una manera audaz pero discreta, se integra a un edificio de otra época y materiales, llegando al punto que si hoy la quitaran muchos la extrañarían, asunto que no sucedió con el pozo petrolero sin petróleo, mejor conocida como La Torre Eiffel (12) que para mi no califica como torre, además ni la diseñó Gustavo Eiffel, y que si bien toda la gente alrededor del mundo impediría que hoy la quitaran, pues era el plan una vez que hubiera terminado la exposición universal de París en el año de 1889. Creo que se quedó porque les dio flojera desarmarla, y se quedó para siempre, siendo el único edificio de 300 metros de altura con tres pisos útiles, pero que resulta ser el más visitado del mundo. Impresionante obra de Ingeniería pero no de Arquitectura.
Con todo lo anterior es que afirmo la enorme dificultad de comprensión que tiene la Arquitectura, cuando la gente acepta y se resigna a cohabitar con impresionantes adefesios que alcanzan muchos de ellos inmerecidamente su publicación en libros y revistas de esta bella pero compleja arte que es la Arquitectura. Adefesio significa: Despropósito, disparate, extravagancia... Buena acepción para estos edificios-adefesios.
Y regresando a Querétaro, debo decir que está generando mucha Arquitectura con una gran cantidad de nuevos desarrollos que están en etapa de embarazo, por lo que insto a todos los Arquitectos que estén involucrados, a fomentar la buena Arquitectura y evitarse el peligro de ser propietarios de un futuro apodo para alguno de sus edificios, y poner en jaque a una ciudad que de por sí sus habitantes no están alcanzando a comprender que le pasa...! Los invito a dejar reservado el oficio de la escenografía para los que se dedican al Teatro, donde todo es actuado y una mera ilusión pasajera... La buena Arquitectura, como la Música, Pintura, y la Literatura, perdura en el tiempo.
CLAUDIO MÁRQUEZ PASSY
