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Una Bolsa Inmobiliaria que acepta NO-exclusivas, NO tiene razón de existir.

MARZO 02 DE 2013

El otro día llegué a una casa en un fraccionamiento que tenía 8 rótulos tapando TODAS las ventanas de la fachada de la casa, y le pido al lector que simplemente me crea, pues ese día por la ley de Murphy no llevaba mi cámara, pero prometo volver a ir para tomar la foto, pues de seguro ahí sigue vendiéndose...

Mientras tanto, y después de 26 años, lo que he visto en este país es, por un lado como se deteriora el mercado de corretaje con situaciones de coyotaje descarado, con No-exclusivas y comisiones de mendigo, mientras aparentemente se profesionaliza por otro lado con decenas de cursos, diplomados, certificaciones y masters por todo el país...

La pregunta que me ronronea o rumia desde hace años diariamente, y a todas horas, es saber ¿Qué o quién causa esta situación?, y aunque en este instante puedo ponerle nombre, prefiero hacer otras consideraciones antes de decir quien es el causante.

Para el lector que lleve más de 20 años es este oficio que hoy se presume como profesión, podrá recordar que yo siempre he sido un promotor de la operación compartida, y por lo tanto de Bolsa Inmobiliaria, a lo que hoy se le intenta americanizar, llamándola M.L.S. en México, que por sus siglas significa Múltiple Listing Service ó literalmente traducido como Servicio de multi-listado, donde todos los inmobiliarios confluyen para inscribir sus propiedades con reglas de operación y ejecución en caso de incumplimiento.

En 1992 en el Distrito Federal la comisión promedio que se cobraba al cliente era el 6% y la única franquicia en ese momento que existía que era Century 21 cobraba 7% y los clientes la pagaban gustosos.

Contábamos con una bolsa inmobiliaria que la producía un proveedor en la ciudad de Chicago y el libro impreso con fotos, descripción, comisión y porcentaje de reparto y mucha otra información incluyendo estadística de ventas, llegaba puntualmente cada 15 días a la oficina de AMPI-DF.

Recuerdo que por ser el organizador, promotor y Director de esa Bolsa Inmobiliaria, yo recogí el primer libro, y esa tarde visité a un cliente mostrándoselo, a lo que después de verlo y revisarlo atónito, me dijo... ¿Cuánto cuesta anunciarse ahí? A lo que por acto reflejo le contesté, NADA! Sólo me tiene que firmar la exclusiva y 150 colegas estarán felices y en disposición de cooperar en la venta de su casa. En 5 minutos que fue lo que me tardé en llenar los campos del contrato de Exclusiva, me lo firmó. No era pariente, amigo ni compadre. Pasaron 3 meses no la vendí, pero otro colega socio de esta bolsa inmobiliaria la tomó, y al mes yo llevé al comprador y cerramos una operación compartida exitosa.

El efecto fue contundente. El valor agregado que tenía nuestro servicio había crecido descomunalmente a la vista del propietario que quería vender su casa.

A partir de ese día poco más del 50% de la facturación de mi despacho fue de operaciones compartidas... recuerdo que me paseaba de oficina en oficina firmando operaciones, ya sea con algún Century, Lomelín, etc. y viceversa llegaban a mi oficina a firmar otras más.

Llega 1995 y por efecto de la devaluación, AMPI D.F. decide cancelar este proyecto por no poder pagar los diferenciales cambiarios, y en ese año yo ya me había ido a vivir temporalmente a Canadá, pero un año después en 1996, en un viaje de regreso me siento a comer con un ex-presidente de AMPI-DF y le pregunté que porqué habían cometido tal error estratégico en lugar de negociar con el proveedor, simplemente me contestó: Claudio... ¿Para qué te fuiste?.

No cabe duda..."lo que no hace tu mano, no lo hace ni tu hermano".

La triste historia de 1996 a 2013 me llevaría varias páginas, pero resumo diciendo que el enésimo proyecto de AMPI al día de hoy y me refiero a la oficina nacional, se llama AMPI-RED, el cual yo ya sabía de su existencia pero fue hasta el viernes pasado 1 de Marzo que me decidí a ir a la oficina donde radica el Director Nacional de esta "Bolsa Inmobiliaria" en la ciudad de Querétaro.

Cuando llegué le dije al responsable que le haría una sola pregunta para saber si teníamos algo que valiera la pena, a lo que le increpé: ¿Este sistema acepta NO-exclusivas?

Con cara de "ya me agarraron en la machincuepa" me contestó: Bueno. este.. (ejem) lo que tenemos en una modalidad llamada "exclusiva-ampired" donde el dueño solo autoriza a un corredor a inscribir su propiedad en ampired pues no puede haber duplicidades dado que se anota la clave catastral.

Ya adivinando que NO me iba a decir, "Por supuesto que NO aceptamos NO-exclusivas" le contesté... ¿Entonces significa que un propietario solo tiene que buscar a un socio AMPI que haya pagado su cuota de AMPI-RED y con ello ya queda dentro del sistema, y sigue con la libertad de contratar otros 7 coyotes que cuelguen sus respectivas 7 jergas en todas las ventanas de la casa, con comisiones del 4%, 3% o 2%? (5% casos raros, 6% sueños del pasado, y 7% sería una fantasía casi erótica)

No pudo decir ya nada...

Francamente ahora si salí muy molesto, frustrado y casi engañado, y juré desahogarme con la pluma (bueno con el teclado) aunque no pertenezca a AMPI y mucho menos a la dizque bolsa inmobiliaria. Yo iba dispuesto a re-inscribirme a AMPI y a pagar lo que me pidieran de cuota de AMPI-RED.

Dije que diría el nombre del causante de las desgracias de nuestro mercado, pero aunque no lo diga ha quedado claro. No se puede estar medio embarazada... ¿AMPI acepta y promueve la no-exclusiva por miedo, pánico, o qué?

Al día de hoy el propietario NO dará exclusiva a menos que se trate del compadre, amigo o pariente del dueño de la inmobiliaria, pero un dueño en su sano juicio, no la dará, no tiene porqué darla, no debe darla, y ni drogado la daría ante una realidad donde 90% de corredores profesionales, (me incluyo), coyotes, jardineros, porteros, y tortilleras no la piden.

Es más... ya no quiero la exclusiva... ¿Para qué? Si todos los coyotes con su jerga colgada persiguen comisiones (migajas) del 100% y nunca compartirían, y si acaso lograron contratarla al 5% dirán que la tienen al 3% compartiendo bondadosamente su 50% es decir un flamante 1.5%!!!!

Querido lector, querido colega... el corretaje está muerto.

Nadie hace nada para rescatarlo y de no ser porque yo he comenzado a atender solo compradores e inquilinos en una estrategia diferente, ya estaría vendiendo seguros, enciclopedias o aspiradoras.

El valor agregado de nuestra profesión está muerto ante los ojos del propietario. Ya no somos útiles, pues ellos pueden anunciar su casa en 50 sitios de Internet, recibir a sus compradores y el animado que quiera comprar la casa, solo tienen que llevárselo al notario.

Nuestro valor agregado de vender más rápido, en mejor precio y con más profesionalismo a través de una verdadera labor de corretaje NO EXISTE. El dueño de la casa ya NO NOS NECESITA, hasta que resurja una poderosa herramienta de marketing posicionada con mucha publicidad en el mercado, donde el dueño tenga que volver a voltear los ojos hacia nosotros pensando que podemos serle más útiles que 8 coyotes "cuelga jergas" y que los 50 sitios de Internet.

Con 90% de "cuelga jergas" en la calle, con comisiones de hambre, sin bolsas inmobiliarias que nos rescaten, el corretaje... insisto... está muerto!

Alguien me dirá que las operaciones compartidas están a la orden del día, y en eso comulgo totalmente, pues entre los cuates que nos conocemos se siguen dando, pero en lugar de aspirar a tener una bolsa inmobiliaria con unos 34,000 corredores como en el caso de Toronto, Canadá, donde hay 5.5 millones de habitantes en el área metropolitana, lo que tenemos tristemente son 300 o 400 en el D.F. con casi 10 millones de habitantes, o 61 en Querétaro con casi 1 millón... o apenas 5,000 (y creo que exagero) en todo un país de 105 millones de habitantes.

¿Cómo se vende más rápido una casa? ¿Con pocos corredores desorganizados y temerosos de la exclusiva o con muchos organizados y con contratos todos en exclusiva?

Por Díos!!! Es aritmética elemental!!!

Ironía... y todavía nos siguen diciendo "corredores"...

Ya me voy. Ya me enojé más, que antes de haber comenzado a escribir!

CLAUDIO MÁRQUEZ PASSY